Guía para familias

     La familia juega un papel protagonista en el desarrollo de las personas, no sólo porque garantiza la supervivencia física, sino también porque es dentro de ella donde se realizan los aprendizajes básicos que serán necesarios para el desenvolvimiento autónomo dentro de la sociedad. La escuela debe de continuar la labor realizada por la familia, y de nada sería fructífera esta labor si no se estableciesen relaciones fluidas con la familia. Se han de fomentar las relaciones familia-escuela determinando diferentes vías o cauces de participación. La colaboración de los padres y madres garantiza una acción educativa más eficaz.

   El aprendizaje de los más pequeños está completamente vinculado con las experiencias y vivencias de la vida cotidiana. Por este motivo, todo lo que hacen fuera del contexto escolar tiene tanta importancia educativa como lo que hacen en su interior. 

   En cuanto a los hábitos, el  hábito de atarse los cordones es una de las actividades que más autonomía dan a un niño, que no tiene que depender de los adultos para continuar jugando o corriendo. Aunque el sistema de velcro o hebilla facilita la autonomía en las edades más tempranas, atarse los cordones de los zapatos y zapatillas es un habilidad que los niños pueden aprender ya en la etapa de Infantil. Es importante que aprendan este tipo de hábito, para que eviten caerse o lastimarse si se les desatan los cordones en alguna ocasión.

     Muchas veces, nos resulta difícil enseñar a ATARSE LOS CORDONES. Los niños se encuentran en una etapa donde no aceptan la frustación y desean por momentos, que los ayudemos en todo, y por otros, necesitan y quieren hacerlo solos. Lo ideal es que empiecen a practicar a los cuatro o cinco años, cuando ya son capaces de realizar ciertos movimientos con los dedos índices y pulgar (es lo que se llama motricidad fina). Es bueno animarlos a hacer pelotitas de papel y luego pegarlas, o abrocharse los botones de la camisa o el abrigo.Con paciencia y sin presionarlos, le enseñaremos el procedimiento, que puede ir acompañado de una canción o una rima que explique los movimientos que hay que hacer para que los memoricen, iré poniendo en este blog actividades y estrategias que facilitan el aprendizaje y el entusiasmo para que familias y maestros puedan utilizarlas.

     Con calma y práctica, podremos ver cómo van aprendiendo a atarse los cordones, que ya no nos piden ayuda, sino que tratan de hacerlos por sí mismos, y así, comienzan a dar un paso más en su independencia.